Después de la extracción de un diente, el hueso de la zona desdentada puede disminuir rápidamente. Dicha disminución puede dificultar, si no imposibilitar, la colocación de implantes en esta zona.
En caso de volumen óseo demasiado escaso, se puede añadir a este nivel un pequeño fragmento de hueso para aumentar su volumen y permitir la colocación del implante.
Zonas de extracción del hueso
- Si el volumen de hueso a extraer es relativamente escaso, las mejores zonas de extracción son el mentón y la zona situada a nivel de los molares inferiores.
- Si el volumen de hueso a extraer es muy importante, el hueso puede extraerse de otras zonas, especialmente a nivel del cráneo y de la cresta ilíaca.
Colocación del hueso
El fragmento de hueso extraído se coloca mediante tornillos de osteosíntesis.
Para que el injerto se suelde al hueso receptor, hay que esperar, normalmente, un periodo de 4 meses. Entonces se podrán colocar los implantes, y es normalmente en este momento cuando se retiran los tornillos de osteosíntesis.
El tabaco y los injertos de aposición
En pacientes no fumadores, el porcentaje de éxito de estos injertos es elevado. En cambio, en los fumadores, se han producido numerosas complicaciones, lo que empuja a la mayoría de cirujanos a no recomendarles esta técnica.
Efectos de la operación
Como después de toda intervención quirúrgica, puede aparecer un edema, una ligera hemorragia o un hematoma.
En cualquier caso, es imperativo seguir la prescripción facultativa y los consejos de su cirujano.
Más información
Para obtener más información puede encontrarla en: Información actualizada sobre implantes dentales.